Posted on
30 mayo 2021
Quizás, lo primero que necesitamos para empezar es saber exactamente qué es el suelo pélvico.
El suelo pélvico y los músculos pubococcígeos (PC) son un conjunto de músculos y ligamentos que cierran la cavidad abdominal en su parte inferior. Su función es sostener los órganos pélvicos (vejiga, uretra, útero, vagina y recto) en la posición adecuada porque de ello depende su normal funcionamiento.
Se suele decir que esta estructura tiene forma de hamaca, pero esta idea no es del todo exacta. Más bien podemos asimilarlo a un “puente colgante”. En este puente tendríamos el hueso sacro en un extremo (donde finaliza la columna vertebral) y en el otro lado el pubis. Los “cables suspensorios”, que gracias a su tensión adecuada mantendrían el puente firme, serían principalmente los ligamentos de sostén.
El suelo de este puente lo formaría el músculo elevador del ano y una lámina de tejido conjuntivo (es el tejido que en nuestro organismo proporciona sostén, en esta zona concreta se llama fascia endopélvica).
Esta musculatura tiene un papel muy importante en prácticamente toda la respuesta sexual: en la lubricación, eyaculación, erección y orgasmo. Y también en el control de la orina y esfínteres.
Entrenarlos y fortalecerlos puede ayudar a las personas de ambos sexos a:
- Tener orgasmos intensos y más placenteros.
- Mayor facilidad a la hora de lubricar.
- Contribuye a evitar problemas de incontinencia urinaria (pérdidas de orina) o si ya se tienen nos permite adquirir control sobre ella.
- Mejora la sexualidad en general.
- Es fundamental entrenarlos cuando hay dificultades con la erección o el control de la eyaculación.
- En dificultades sexuales tales como dispareunia (dolor en las relaciones sexuales), vaginismo, en la menopausia, vagina trófica,…
- Previene infecciones genito-urinarias.
- Prepara la zona para el parto.
- Recuperación más rápida después de un embarazo y parto.
- Evita la caída de los órganos intraabdominales (prolapso).
Si notamos que alguna de estas áreas falla, es posible que nuestros músculos no estén en su mejor momento y es necesario trabajar el tono y la fuerza de estos.
¿Cómo se pueden entrenar?
La forma más efectiva para hacerlo es a través de los ejercicios de Kegel.
El Dr. Arnold Kegel (1894-1981) fue un ginecólogo estadounidense que se dio cuenta de que los músculos del suelo pélvico de las mujeres se debilitaban tras el parto. Observó los efectos de realizar sus ejercicios en miles de mujeres y gracias a ello pudo demostrar que los músculos del suelo pélvico se pueden ejercitar como cualquier otro musculo del cuerpo. En sus conclusiones de la investigación afirmó que los músculos del suelo pélvico son los más versátiles del cuerpo humano y descubrió que pueden recuperar su fuerza incluso después de años sin usarlos.
¿Cómo se realizan los ejercicios de Kegel?
Los ejercicios de Kegel son unas rutinas de contracción y relajación de los músculos pélvicos que permiten tonificarlos y fortalecerlos. Lo primero que hay que saber es identificar en tu cuerpo qué músculos trabajar, para que no realices los movimientos con el abdomen, ni glúteos, ni con los muslos,… Así que, para reconocerlos, lo más fácil es un pequeño truco, cuando vayas a orinar, córtala y presta atención donde notas que estas contrayendo, esa es la musculatura a trabajar. Consulta con un especialista para que te indique la manera correcta de hacer el entrenamiento y verás como en poco tiempo notas los resultados.
Si quieres saber más, click aquí.
Tags: Dispareunia, Ejercicios de Kegel, Erección, Eyaculación Precoz, Kegel, Músulos puboccocígeos, suelo pélvico, Vaginismo